PERSPECTIVAS DE UN MUNDO IRREAL (VIII) "UN MUNDO HERMOSO"



A veces la vida es sencillamente gris. Se pierden los colores. Se olvidan las ilusiones. Los objetivos, los pequeños motores cotidianos que animan la existencia del día a día, se diluyen como arcilla en el agua. Y, sin embargo, un paisaje gris no es más que un retazo expresionista de la vida, a la que miramos desde la desesperanza.

La virtud no está en el ojo que mira, ni en el objeto mirado, sino en el ánima que se asoma al mundo viviendo un dolor al tiempo que olvida que no hay mundo sin color.




Y lo cierto es que este es un mundo hermoso que, en lo extremadamente simple, puede permitirte encontrar la belleza. Y que, en la soledad de un almendro, te permite encontrar la compañía de las flores. Y que, en un árbol que se asoma a las montañas, te deja encontrar la metáfora del hombre esforzado en erguirse firme sobre el mundo y perdurar buscando la Luz.

Somos árboles. Somos montañas. Somos flores. Somos tantas cosas…





Comentarios

  1. No sé Miguel ángel, si llevas razón o no; (creo que sí)... pero una cosa es cierta: la belleza de la que estamos rodeados (a las fotografías me remito, son muy reveladoras y muy buenas) no puede ser indiferente a nadie... tal vez seamos todo eso y algo más.

    Un cordial saludo de Utopazzo.

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  2. Carmen Martín Segovia.8 de marzo de 2011, 20:57

    Teniendo en cuenta, que existimos en una tercera dimensión, dónde parece ser que el alma aún se siente bastante prisionera de sus limitaciones, sean estas esos momentos grises y apagados en los cuales se torna toda una existencia de soledad y tristeza, pero a la vez se complementa con breves momentos de felicidad y color. Sí amigo, esa es la vida que encontramos a nuestro paso por el Camino.
    Gracias por tu reflexión, por las fotos y sobre todo por esas idea trascendental de que el alma sabia, entiende la soledad dentro del color y en armonía con la vida, ya que todo forma parte del todo. Y el todo es armonía y belleza.
    Te sigo en el Camino...

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  3. Creo, Utopazzo, que sin duda somos eso y mucho más. Todo cuanto vemos, todo lo que nos rodea, forma parte de nosotros, es una parte de nosotros pero contemplada desde nuestra propia singularidad como individuos autoconscientes pero dormidos. No sólo somos eso, estamos por ello en eso, y eso es nosotros.
    Creo que no hay más. Formamos parte del paisaje de la vida, y en nosotros esta ha elegido la opción de generar conciencia de sí. ¿Pero qué sabemos de los árboles, de estos espíritus ancianos encargados de sostener el cielo?. La conciencia está en todo.

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  4. Gracias, Carmen, por tus sabias palabras. Somos viajeros en el rio de la vida. Y la vida está hecha de todo eso. Pero sobre todo somos color y luz. Así es como lo veo. Así es como lo siento.
    Todo forma parte del Todo, y nosotros en ello.
    Tenemos que mirar a la vida con Luz. Tenemos que encendernos como estrellas en la noche del hombre.

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  5. Gracias Miguel Ángel por tus palabras; sobre todo, por la forma que tienes de exponer aquello en lo que estás inmerso... casi puedo visualizar tu expresión, con una calma y tranquilidad, propias del poeta. Creo que lo haces de una forma (que sin sentar cátedra por ello) que a propios y extraños, podrá parecerle extraña o confusa, más al tiempo que recapacitas, te das cuenta de todo el significado... esa es la grandeza de las cosas: con mucho (a veces) se dice poco tal vez y lo contrario parece funcionar mejor.
    Al final resulta que sabemos muy poco y al mismo tiempo, somos conscientes que sabemos más y mejor sobre algo sencillo. Como dijo alguien (no recuerdo su nombre) "Daría todo lo que sé, por lo que no sé"
    Un abrazo.

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  6. Soy una mujer enamorada y sola a la vez,es cierto todo este mundo en que vivimos llenos de falsedad y de una falsa sociedad ,cuando me siento así busco la naturaleza UCHIZA un pueblo pequeño rodeado de selva,un pueblo donde solo hay naturaleza y uno mismo,donde la fuerte lluvia con el calor me renueva, donde el rió seguido de lluvia me encanta.donde la soledad viene a formar parte de una vía al menos sin tristezas

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  7. No solo eres una mujer enamorada y sola, Mireya, sino una mujer que atesora una gran riqueza interior.
    A veces la vida nos acaricia bajo la forma de lluvia, y hay que dejarse acariciar. Después la lluvia cesa, y cesan las caricias. Pero nos queda el recuerdo y saber que las lluvias regresarán.
    Otras veces la vida nos acaricia con la soledad, entonces hay que oír qué es lo que la vida nos grita desde su clamoroso silencio. Qué nos dice. Y por qué nos lo dice.
    Como la lluvia, la soledad se marchará.
    Cuídate.

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