Cuando contemplo esta imagen, veo un mundo que no es el nuestro.
Ni nosotros (ni los que vivieron antes que nosotros, ni aquellos que vivieron antes de los que vivieron antes que nosotros) quisimos este mundo.
¿Pero cómo podemos parir un mundo que no queremos?. ¿Cómo podemos andar pasos que nunca quisimos andar?.
De una manera resuelta, tenemos que coger las riendas del destino de este mundo, y no permitir que espíritus oscuros sedientos de poder sean los exclusivos amos del destino de la humanidad.
De una u otra manera hay que dar el salto.
El salto... ¿Hacia dónde?
ResponderEliminarEly.
El salto hacia donde deseemos saltar... ¡¡Saltando sin miedo!!
ResponderEliminarPero saltando respetuosamente.
exacto, así es desde que el mundo es mundo, o te dejas llevar o luchas por lo que valoras
ResponderEliminar¿Hacia dónde, Ely?. Pues hacia el cambio de conciencia, al cambio en la conciencia. Eso es lo que nos convertirá en seres verdaderamente liberados, y lo que hará que la sociedad genere individuos que, en su vocación por ser útiles a los demás en el servicio público, sean verdaderamente transparentes y auténticos. Mientras sigamos dormidos, "los despiertos" seguirán campando a sus anchas, y el mundo seguirá en manos de dirigentes pobres de espíritu poseídos por el poder del dinero y por el miedo a perder el poder.Y continuaremos de conflicto en conflicto, que es la forma que utiliza la codicia para alimentarse. Y la forma de garantizar que unos están sobre otros controlando, dominando, prevaleciendo.
ResponderEliminarAsí que el salto, Ely, es DESPERTAR. Y así, cambiar en nosotros para cambiar el mundo.
No es un salto al vacío, sino a la Totalidad.
Claro, Nalea, que el salto es respetuoso. ¡Si lo que significa es un cambio EN LA CONCIENCIA!. Y ello implica el mayor de los respetos al prójimo que es, además, el igual, y más aún, nosotros mismos.
ResponderEliminarExacto,Elisa. No debemos dejarnos llevar por la corriente y, si bien a veces no es fácil romper la dinámica, debemos despertar y reconocer dónde y cómo se debe propiciar el cambio. Y el cambio viene por la revolución de la conciencia.
ResponderEliminarY en algún momento (aunque así sea desde que el mundo es mundo)daremos el salto, y el cambio se producirá, y dejará de ser así.
Completamente de acuerdo Miguel Angel. Qué necesario un salto consciente hacia la transformación de una realidad viciada hacia una realidad DESPIERTA.
ResponderEliminarJuana
Miguel ángel, envidio tu optimismo y energía que desprende cuando de hablar claro, se trata. No se puede hablar más claro (pese a que al parecer, hay personas que no lo entienden o quieren otras respuestas) y con meridiana calma, con la tranquilidad que da saberse comprendido y saber, qué camino seguir... me gusta tu modo filosófico pues además, se te ve enamorado de la vida y todo cuanto te rodea. Para llegar a ese estado, hace falta pensar mucho, trabajar mucho la mente y no dejar escapar cualquier reflexión, por nimia que parezca.
ResponderEliminarTambién yo, soy un enamorado de la vida y el entorno... pero sobre todo, de mi hijo, que me mostró el camino que me llevó a encontrar "mi" sentido de la vida. Claro que antes, estaba la madre que fue la que subió esa persiana para ver el paisaje...
Lástima que yo, no sea tan optimista como tú, pues si de generalizar se trata, no confío demasiado en el "hombre"; aunque por suerte, es sólo mi apreciación, de la que puedo estar equivocado. En algunos, aún confío.
Un abrazo.
Estoy respondiendo te muy tarde , fíjate tres años después, espero que tu opinión del hombre haya cambiado y ahora sepas que todo lo malo pero sobre todo lo bueno esta en el ser intrínsecamente y que con sólo fuerza mental buenos deseos y mucho amor lograremos que cualquier revolución del mal quede desactivada
EliminarMiguel Ángel, entonces debo reconocer que ante el poder...¡¡Sufro de una profunda narcolepsia!! XDDD
ResponderEliminarEly.
A pesar de todo, Juana, yo creo que estamos en ello. Pero, desde luego, es necesario insistir en ello. Porque una característica de este sueño profundo que vivimos es que genera la sensación equívoca de estar despierto. Y así, secuestra la necesidad de DESPERTAR.
ResponderEliminarSin embargo, reconocer que estamos dormidos empieza a transformar la experiencia de la vida en un sueño lúcido, es decir, un sueño en el que tomas conciencia de estar dormido, y adquieres conciencia de la necesidad de DESPERTAR.
El automatismo generado por la idea experiencial de que la vida transcurre y nosotros transcurrimos en ella, es el motor de lo que tú llamas "una realidad viciada". Pero, si tomamos conciencia, es decir y volvemos a lo mismo, si DESPERTAMOS, la "realidad viciada" se convierte en la realidad lucida, o sea, en la realidad de la Luz. ¿Acaso no merece la pena abrir los ojos y VER?. Desde luego que sí.
Ay..., Utopazzo, es el gran dilema. ¿Confiar o no confiar en el hombre?. Yo, desde luego, CREO EN EL SER HUMANO. Todo está contenido en nosotros. Todo futuro. Toda esperanza. Toda alegria...
ResponderEliminarSomos capaces de lo peor y de lo mejor... Pero creo, y es necesario además que sea así, en lo mejor del hombre. Y por ello apuesto.
El motor del cambio está en nosotros, así como la meta final.
Es cierto que somos capaces de lo mejor..., y de lo peor. Pero si dejamos de creer en nosotros mismos..., entonces...ya no hay nada que hacer.
Creo que el ser humano es bueno por naturaleza, y en el camino, las piedras y zarzas, las caídas y obstáculos, van torciendo sus pasos y nublando su mente, robándole perspectiva y visión... Pero en todos brilla adormecida una Luz que, antes o después, habrá de ser despertada.
Por otra parte, el guión de nuestra vida está inserto en un guión mayor, dentro del cual el nuestro y particular tiene sentido, y cobra mayor sentido. Pero, a la vez, ese guión que contiene nuestra historia particular, la abarca en un ámbito y nivel que la trasciende, conviertiendo nuestra vida en un acontecimiento de carácter cósmico.
"Mi sentido", como el tuyo, forman parte de EL SENTIDO. Y esta perspectiva de mi realidad (conformante de una realidad mayor que necesita ser comprendida) hace que del mismo modo intente comprender la parcela de realidad que se me ha asignado, para así vivirla conscientemente y en ella DESPERTAR. Así es como yo lo vivo. Así es como yo lo siento.
Bueno, Ely, digamos que somos sonámbulos que caminan por las calles jactándose de su presunta lucidez. Y que confunden sus ronquidos con el rugido de las olas.
ResponderEliminarHola Miguel Àngel y todos los presentes. Debemos recordar que somos una dualidad, y como tal, tenemos contenidos el bien y el mal.Partiendo del libre albeldrìo, cada cual decide el camino a tomar. Vamos empezando a despertar cuando haciendo a un el lado el ego, decidimos vibrar en el bien. Cada uno tenemos nuestro tiempo para despertar la conciencia. Siento que hoy tanto el bien como el mal estàn potenciados, es decir, estamos despertando en mayor cantidad y por lo cual las fuerzas obscuras tambièn estàn creciendo. No quiero tomar la trillada frase de "El bien siempre gana", pero espero y deseo que al final asì sea!! Muchas gracias Miguel Àngel por estar en el camino y por tu interès de compartirlo con nosotros....
ResponderEliminarCreo, Mari, que al final será así, y que se impondrá la supremacía de la Luz sobre las sombras, dando fin a un tiempo, y significando el inicio de un nuevo tiempo y un nuevo mundo. Aunque, lógicamente, a nivel de lo humano, somos nosotros los principales valedores de ese cambio, precisamente realizando ese trabajo sobre la Conciencia. A otros niveles, más alejados del ámbito de lo humano, pero muy relacionados con él, los valedores pertenecen a esferas diferentes aunque emparentadas, por decirlo de algún modo, con nosotros. Obviamente, coincido contigo, cada uno tiene su tiempo para despertar..., pero hay que trabajarlo. Y ese trabajo sobre nosotros mismos es una parte importante de la clave que generará el cambio en nosotros para contribuir al cambio en el resto. Trabajar sobre la conciencia, trabajar conscientemente, forma parte de nuestra función para propiciar aquello que, en este trabajo, he referido como "el salto".
ResponderEliminarGracias por tu comentario y reflexión.
A pesar de que estamos inmersos en un mundo caótico, dónde lo material queda por encima de lo meramente espiritual, la vida nos está brindando la posibilidad de dar el salto, la evolución, el encontrarnos con el Ser de Luz. Es el tiempo de que el ego vaya dejando paso a la conciencia...
ResponderEliminarGracias por encontrarnos en el camino.
Y esa oportunidad, Carmen, es cotidiana y constante.Comparto tu pensamiento.
ResponderEliminarGracias por estar ahí.